Después de una semana de las elecciones federales, la Arquidiócesis de México aseguró que los comicios han revelado un fragmento ciudadano cansado y desencantado con la democracia y que acudieron a las urnas para anular su voto.
En la editorial del semanario católico Desde la Fe, la Iglesia afirmó que el desánimo ciudadano es una expresión amarga ante la realidad política que se vive en donde no hay ideas claras de por medio.
“Han quedado en el camino los partidos políticos que estaban aniquilados de antemano por sus divisiones internas y han quedado todos marcados por una campaña electoral mediocre que aturdió a los ciudadanos y no despertó el entusiasmo y compromiso de los mismos”, indicó.
La Arquidiócesis de México dijo que el resultado en estas elecciones queda muy lejos de ser una celebración aun para los que resultaron triunfadores, pues es evidente que todos deben reflexionar en torno al margen de legitimidad que la ciudadanía les ha conferido.
En las elecciones, señala, fueron muchos los que decidieron no expresar nada porque se sienten afectados a causa de la situación económica que va a la baja y el desempleo que va al alza.
“Desconcertados por una lucha contra el narcotráfico en todo el territorio mexicano, en medio de verdaderos baños de sangre, que parece no terminar nunca”, refiere.
La Iglesia católica trabajará para responder a los grandes retos que encara México, no sin antes objetar a aquellos que han afirmado que la derrota del partido en el poder es también un descalabro para la jerarquía católica.
“A estos detractores extraviados será necesario recordarles que si bien algunos partidos políticos han decidido tener coincidencias ideológicas con los principios doctrinales de la Iglesia, el compromiso de ésta debe de estar por encima de visiones partidistas si es que quiere ser fiel a su misión orientadora”. México, D.F./Ruth Rodríguez (El Universal)
En la editorial del semanario católico Desde la Fe, la Iglesia afirmó que el desánimo ciudadano es una expresión amarga ante la realidad política que se vive en donde no hay ideas claras de por medio.
“Han quedado en el camino los partidos políticos que estaban aniquilados de antemano por sus divisiones internas y han quedado todos marcados por una campaña electoral mediocre que aturdió a los ciudadanos y no despertó el entusiasmo y compromiso de los mismos”, indicó.
La Arquidiócesis de México dijo que el resultado en estas elecciones queda muy lejos de ser una celebración aun para los que resultaron triunfadores, pues es evidente que todos deben reflexionar en torno al margen de legitimidad que la ciudadanía les ha conferido.
En las elecciones, señala, fueron muchos los que decidieron no expresar nada porque se sienten afectados a causa de la situación económica que va a la baja y el desempleo que va al alza.
“Desconcertados por una lucha contra el narcotráfico en todo el territorio mexicano, en medio de verdaderos baños de sangre, que parece no terminar nunca”, refiere.
La Iglesia católica trabajará para responder a los grandes retos que encara México, no sin antes objetar a aquellos que han afirmado que la derrota del partido en el poder es también un descalabro para la jerarquía católica.
“A estos detractores extraviados será necesario recordarles que si bien algunos partidos políticos han decidido tener coincidencias ideológicas con los principios doctrinales de la Iglesia, el compromiso de ésta debe de estar por encima de visiones partidistas si es que quiere ser fiel a su misión orientadora”. México, D.F./Ruth Rodríguez (El Universal)
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