Ortega, presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), aceptó que siente presión por las voces disidentes que exigen su dimisión al frente de este organismo político. Sin embargo, dejó claro: “No renuncio”.
Entrevistado en la antesala de su oficina en la sede nacional perredista, el aguascalentense indicó que no responderá a los señalamientos de Cuauhtémoc Cárdenas —que piden su renuncia y la expulsión de los militantes que fueron candidatos de otros partidos o promovieron el voto en su favor—.
“Todo mundo tiene derecho a dar sus opiniones; yo respeto las del ingeniero Cárdenas, pero no debo de dar una respuesta a esas u otras opiniones de manera particular, especialmente ahora; quiero que demos una opinión en términos de conclusiones del órgano colectivo de la Comisión Política del propio secretariado.
Debate en los medios no conviene
“Me parece que no conviene, de cara hacia el Consejo Nacional, establecer otra vez un debate en los medios de comunicación. Con todo respeto lo digo, primero tenemos que ver en los órganos directivos del partido la reflexión tan útil y tan necesaria que lo es.
“Escuchamos con mucha atención esas opiniones, son muy enérgicas en términos de expulsar a determinados compañeros, pedir la dimisión de otros compañeros. Bueno, evidentemente que posiciones de esa naturaleza necesitan una elemental reflexión de los órganos de dirección del partido”, consideró el dirigente.
—¿Valdría la pena reunirse con el ingeniero Cárdenas? —se le cuestionó.
—Desde luego, es consejero, insisto; tan valdría la pena que el ingeniero Cárdenas pues fue invitado, convocado a esa reunión (de Morelia, hace unos días). Por equis circunstancia no pudo asistir, pero desde luego que vale la pena reunirse con el ingeniero y con otros compañeros del partido.
Siente presión
—¿La dirigencia del partido no se siente presionada por todas aquellas voces disidentes?
—Pues sí, sí me siento presionado, pero tengo la suficiente determinación para soportar esas presiones, para ver en función del interés del partido, para resistir críticas infundadas, para tomar en cuenta críticas fundadas y para no tomar decisiones apresuradas, decisiones que en lugar de contribuir a que resolvamos nuestros problemas, los compliquen.
—¿Pudieras renunciar?
—No. He reiterado que no voy a renunciar al partido; ésta es la enésima repuesta que doy a la enésima pregunta. No voy a renunciar al partido porque estoy tratando de actuar con responsabilidad y eso implica que veamos soluciones en el conjunto del partido y no decisiones unipersonales, decisiones aisladas, y entonces no es una actitud de obcecación, sino a mi juicio es una actitud de responsabilidad con el partido, y por lo tanto, te reitero, no voy a renunciar al partido.
Ortega respondió en al menos ocho ocasiones que no entrará en polémica pública con Cárdenas y que al seno de la Comisión Política Nacional se analizarán las posiciones esgrimidas por el fundador del Partido de la Revolución Democrática. México, D.F./Francisco Reséndiz (El Universal)
Entrevistado en la antesala de su oficina en la sede nacional perredista, el aguascalentense indicó que no responderá a los señalamientos de Cuauhtémoc Cárdenas —que piden su renuncia y la expulsión de los militantes que fueron candidatos de otros partidos o promovieron el voto en su favor—.
“Todo mundo tiene derecho a dar sus opiniones; yo respeto las del ingeniero Cárdenas, pero no debo de dar una respuesta a esas u otras opiniones de manera particular, especialmente ahora; quiero que demos una opinión en términos de conclusiones del órgano colectivo de la Comisión Política del propio secretariado.
Debate en los medios no conviene
“Me parece que no conviene, de cara hacia el Consejo Nacional, establecer otra vez un debate en los medios de comunicación. Con todo respeto lo digo, primero tenemos que ver en los órganos directivos del partido la reflexión tan útil y tan necesaria que lo es.
“Escuchamos con mucha atención esas opiniones, son muy enérgicas en términos de expulsar a determinados compañeros, pedir la dimisión de otros compañeros. Bueno, evidentemente que posiciones de esa naturaleza necesitan una elemental reflexión de los órganos de dirección del partido”, consideró el dirigente.
—¿Valdría la pena reunirse con el ingeniero Cárdenas? —se le cuestionó.
—Desde luego, es consejero, insisto; tan valdría la pena que el ingeniero Cárdenas pues fue invitado, convocado a esa reunión (de Morelia, hace unos días). Por equis circunstancia no pudo asistir, pero desde luego que vale la pena reunirse con el ingeniero y con otros compañeros del partido.
Siente presión
—¿La dirigencia del partido no se siente presionada por todas aquellas voces disidentes?
—Pues sí, sí me siento presionado, pero tengo la suficiente determinación para soportar esas presiones, para ver en función del interés del partido, para resistir críticas infundadas, para tomar en cuenta críticas fundadas y para no tomar decisiones apresuradas, decisiones que en lugar de contribuir a que resolvamos nuestros problemas, los compliquen.
—¿Pudieras renunciar?
—No. He reiterado que no voy a renunciar al partido; ésta es la enésima repuesta que doy a la enésima pregunta. No voy a renunciar al partido porque estoy tratando de actuar con responsabilidad y eso implica que veamos soluciones en el conjunto del partido y no decisiones unipersonales, decisiones aisladas, y entonces no es una actitud de obcecación, sino a mi juicio es una actitud de responsabilidad con el partido, y por lo tanto, te reitero, no voy a renunciar al partido.
Ortega respondió en al menos ocho ocasiones que no entrará en polémica pública con Cárdenas y que al seno de la Comisión Política Nacional se analizarán las posiciones esgrimidas por el fundador del Partido de la Revolución Democrática. México, D.F./Francisco Reséndiz (El Universal)
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