Faltan las propuestas en inicio de las campañas
A tres días de que arrancaron formalmente siete de 12 procesos electorales para renovar gubernaturas, los partidos políticos han centrado sus discursos en la confrontación y las acusaciones contra sus opositores, más que en las propias propuestas de los candidatos.
En sus distintas giras, los líderes nacionales de los tres principales partidos políticos (PRI, PAN y PRD), se han enfrascado en críticas y denostaciones mutuas para sus adversarios electorales en cada mitin al que acuden.
Hace unos días, la lideresa nacional del PRI, Beatriz Paredes, al presentar formalmente a su candidato a la gubernatura de Oaxaca, Eviel Pérez, calificó las alianzas opositoras que construyeron el PAN y el PRD como “espurias” y dijo que le harían los mandados a su partido el próximo 4 de julio.
De gira por Durango, el líder nacional del PAN, César Nava, le respondió a la priísta y dijo que están “nerviosos y desesperados” porque ven “venir el voto popular y por supuesto le temen al veredicto de la ciudadanía”, y explicó que en el PRI siguen siendo los mismos: “no han cambiado, está claro que chango viejo no aprende maroma nueva... así harán campaña y así han gobernado”.
Jesús Ortega advirtió que el PRI va a tratar de crear un clima de inestabilidad, propicio a la confrontación y la violencia que ahuyente a los electores de las urnas.
Para los politólogos Jonh Ackerman y Macario Schettino este tipo de escenarios permeará los 75 días que quedan para que finalicen las campañas, pero no se llegará a la crispación política.
Ackerman, especialista de la UNAM, dijo que es momento para valuar las cualidades, fortalezas, debilidades, la experiencia y los resultados que hayan entregado cada uno de los candidatos, “es un momento de hacer una evaluación ciudadana a los candidatos” y no de las descalificaciones entre ellos.
En los últimos días, Beatriz Paredes ha visitado Tamaulipas, Aguascalientes, Oaxaca, Yucatán, Veracruz, Sinaloa y Zacatecas para arrancar formalmente campañas o presentar a sus candidatos.
El líder de PAN, César Nava, ha acudido en dos semanas a Oaxaca, Aguascalientes, Sinaloa, Puebla, Zacatecas y Chihuahua.
En tanto, Jesús Ortega, dirigente del PRD, ha hecho giras por Puebla, Oaxaca, Aguascalientes y Zacatecas.
Sin temor a alianzas
La presidenta del tricolor Beatriz Paredes rechazó que su partido tenga miedo por la presencia en Oaxaca de la coalición PAN-PRD; “hemos sido muy claros: nos parece que esas alianzas PAN-PRD, desnaturalizan a ambos partidos, y han generado un enorme desconcierto es en los auténticos militantes”.
Incluso el pasado domingo, en su gira por Aguascalientes, Nava dijo que el PRI quería ganar en los tribunales lo que no podía ganar en las urnas al tratar de sacar de la contienda a su abanderado, Martín Orozco, pero todo fue porque el tricolor “le tiene miedo”, según el panista.
El especialista Macario Schettino comentó que ve normales las acusaciones, porque esa es la democracia y la política; “de eso se trata —dijo— de que se enfrenten las ideas, de que haya discusiones que parecen muy fuertes, pero eso es mucho mejor a que el asunto se resuelva a golpes eso es precisamente la gran virtud de las democracias pero eso no significa que se polarice nada”.
A tres días de que arrancaron formalmente siete de 12 procesos electorales para renovar gubernaturas, los partidos políticos han centrado sus discursos en la confrontación y las acusaciones contra sus opositores, más que en las propias propuestas de los candidatos.
En sus distintas giras, los líderes nacionales de los tres principales partidos políticos (PRI, PAN y PRD), se han enfrascado en críticas y denostaciones mutuas para sus adversarios electorales en cada mitin al que acuden.
Hace unos días, la lideresa nacional del PRI, Beatriz Paredes, al presentar formalmente a su candidato a la gubernatura de Oaxaca, Eviel Pérez, calificó las alianzas opositoras que construyeron el PAN y el PRD como “espurias” y dijo que le harían los mandados a su partido el próximo 4 de julio.
De gira por Durango, el líder nacional del PAN, César Nava, le respondió a la priísta y dijo que están “nerviosos y desesperados” porque ven “venir el voto popular y por supuesto le temen al veredicto de la ciudadanía”, y explicó que en el PRI siguen siendo los mismos: “no han cambiado, está claro que chango viejo no aprende maroma nueva... así harán campaña y así han gobernado”.
Jesús Ortega advirtió que el PRI va a tratar de crear un clima de inestabilidad, propicio a la confrontación y la violencia que ahuyente a los electores de las urnas.
Para los politólogos Jonh Ackerman y Macario Schettino este tipo de escenarios permeará los 75 días que quedan para que finalicen las campañas, pero no se llegará a la crispación política.
Ackerman, especialista de la UNAM, dijo que es momento para valuar las cualidades, fortalezas, debilidades, la experiencia y los resultados que hayan entregado cada uno de los candidatos, “es un momento de hacer una evaluación ciudadana a los candidatos” y no de las descalificaciones entre ellos.
En los últimos días, Beatriz Paredes ha visitado Tamaulipas, Aguascalientes, Oaxaca, Yucatán, Veracruz, Sinaloa y Zacatecas para arrancar formalmente campañas o presentar a sus candidatos.
El líder de PAN, César Nava, ha acudido en dos semanas a Oaxaca, Aguascalientes, Sinaloa, Puebla, Zacatecas y Chihuahua.
En tanto, Jesús Ortega, dirigente del PRD, ha hecho giras por Puebla, Oaxaca, Aguascalientes y Zacatecas.
Sin temor a alianzas
La presidenta del tricolor Beatriz Paredes rechazó que su partido tenga miedo por la presencia en Oaxaca de la coalición PAN-PRD; “hemos sido muy claros: nos parece que esas alianzas PAN-PRD, desnaturalizan a ambos partidos, y han generado un enorme desconcierto es en los auténticos militantes”.
Incluso el pasado domingo, en su gira por Aguascalientes, Nava dijo que el PRI quería ganar en los tribunales lo que no podía ganar en las urnas al tratar de sacar de la contienda a su abanderado, Martín Orozco, pero todo fue porque el tricolor “le tiene miedo”, según el panista.
El especialista Macario Schettino comentó que ve normales las acusaciones, porque esa es la democracia y la política; “de eso se trata —dijo— de que se enfrenten las ideas, de que haya discusiones que parecen muy fuertes, pero eso es mucho mejor a que el asunto se resuelva a golpes eso es precisamente la gran virtud de las democracias pero eso no significa que se polarice nada”.
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